Entradas populares

jueves, 14 de agosto de 2014

AGENDA PARA GOBIERNOS QUE QUIEREN GANAR LAS PRÓXIMAS ELECCIONES


Una advertencia preliminar

Esta propuesta de agenda está elaborada pensando sobre todo en los nuevos gobiernos que se habían constituido a partir de las elecciones locales y autonómicas de 2.011. Ahora, creo que puede servir también para que esos mismos gobiernos, evalúen cuál es su situación con respecto a esta agenda, corrijan en lo que puedan sus puntos débiles en lo que queda de mandato, o, en su caso, vayan diseñando una estrategia para recuperar lo que pueden perder en 2.015.

Por la longitud del texto, lo presento en dos entradas, 1 y 2.

++++++++++++++


Lo que pase dentro de cuatro años, está fraguándose, en buena parte, ahora mismo, cuando se están constituyendo y empiezan a funcionar los nuevos gobiernos y la dirección de cada administración local/territorial.

Y durante esos cuatro años pueden pasar cosas como que

·         Una parte de los votantes del gobierno, no se sientan satisfechos con el nuevo gobierno; sea porque esperaban cosas de él que no estaban en el programa electoral, sea porque los equilibrios de un gobierno de coalición obligan a una política que no les satisface; sea porque los recortes en los gastos genera descontento en ellos.
·         Los partidos oponentes pueden encontrar las maneras de movilizar a sus abstencionistas, de lo que ya existe experiencia en nuestro país en situaciones diversas, y más si nuestros errores lo animan.
·         Nuevos votantes y nuevas reivindicaciones de los existentes, plantean mayores capacidades de respuesta y de construir consensos.

Estas y otras circunstancias aconsejan que los nuevos gobiernos no olviden que la esencia de la sostenibilidad política radica en el APRENDIZAJE PERMANENTE.

Algunas de las preocupaciones más salientes que ahora merece la pena que formen parte de la agenda de aprendizajes de los nuevos gobiernos, parecen ser ahora:

1.      Redirigir la política financiera y fiscal de la Institución local o territorial.
Ya no se puede dirigir financieramente una institución pública a partir de una lógica incremental de los ingresos y un reparto de los gastos en función de la importancia política interna del titular de cada departamento. Los recursos tendrán que ser asignados a las actividades según la prioridad que represente el valor público que generan y el gasto que extraen del presupuesto publico (= monto de gasto – ingresos propios de la actividad). Y los resultados de los sucesivos ejercicios presupuestarios deberán asegurar que la diferencia de ingresos y gastos asegure el ahorro (bruto y neto) necesario para hacer frente a las amortizaciones de los créditos contraídos, al menos, O en caso positivo para acometer nuevos servicios o inversiones por autofinanciación. Y, al mismo tiempo, cumplir los requisitos de remanente de tesorería y la carga financiera y el indicador de carga financiera que determina la normativa hacendístical.[1] 
2.      Encontrar en los presupuestos públicos un instrumento para priorizar con sensibilidad política y para dirigir con eficiencia su ejecución.
Al menos desde el comienzo de los años 90, la legislación presupuestaria ha completado un conjunto de normas e instrumentos para poder llevar a la práctica una gestión publica eficiente. Los planes financieros a cuatro años, los presupuestos presentados funcionalmente han permitido visualizar el valor público de cada una de las actividades ejecutadas por cada institución, como criterio para una priorización que tenga en cuenta una sensibilidad política.
Experiencias realizadas en cuanto a desarrollar estructuras presupuestarias suficientemente analíticas (de 200/400 actividades diferentes en municipios pequeños y medianos), calcular sobre ellas las bases presupuestarias de un ejercicio y su reducción antes de ampliarlas en el siguiente ejercicio; y priorizar esas ampliaciones, han demostrado que una voluntad política consciente no tiene porqué perder votos para mantenerse en la línea de los objetivos de ahorro necesarios. Priorizar las actividades que financia un presupuesto analítico. de acuerdo con las prioridades de los votantes y las de los técnicos y empleados públicos, puede asegurar ahorros importantes de gastos sin eliminar prestaciones priorizadas por los votantes.
  Y, por otra parte, con el aval de una Norma Presupuestaria de Eficiencia, este tipo de presupuesto funcional programado por actividades, sirve para asegurar su ejecución eficiente y congruente con los resultados políticos que se persiguen.[2]







  
3.      No perder de vista a los votantes, ni al partido y la financiación de sus actividades.
Cuando se entra a gobernar no se puede desguarnecer el partido. Y si esto se ha hecho ya en el mandato anterior, convendrá corregirlo cuanto antes. Para llegar con fuerza a las próximas elecciones, se necesita mantener el acompañamiento de los votantes antiguos y conocer quiénes son lo nuevos que nos votaron esta ocasión, y los nuevos potenciales en la próxima,  para cultivarlos y asegurar que vamos a ser capaces de responder adecuadamente a sus demandas, que es muy fácil que no estén en el programa electoral.
Hay una tentación, difícil de resistir, de llevarse a todos los “buenos” a la institución, y al mismo tiempo, encontrar así una manera de financiar sus salarios. Pero la experiencia ha venido demostrando que esto acaba debilitando demasiado al partido, y esta falta de fuerza se paga en las siguientes elecciones. El partido necesita una buena dirección que no es la del ayuntamiento, y necesita una financiación – que ahora habrá que buscar en los votantes  en mayor proporción – para pagar a sus responsables y sus actividades propias.
Y, en la medida, que el número de puestos institucionales ha crecido, el partido con su gobierno debería asegurar que va entrenando personas competentes para hacerse cargo  de los puestos institucionales (gobierno, dirección, asesoría)   actuales y previsibles próximamente



[1] No es difícil dominar las reglas de la gestión financiera pública, a poco que alguien no se empeñe en oscurecerla. En el cuaderno nº 2 de los Cuadernos de Trabajo para Cargos Públicos Locales/Territoriales, bajo el título de ENTENDER LA SITUACIÓN ECONÓMICO-FINANCIERA DE UNA INSTITUCIÓN LOCAL, se recoge una visión práctica que sería aconsejable dominaran todos los políticos, estén en el gobierno o en la oposición, así como los especialistas de los medios de comunicación en la información municipal/ territorial.    

[2] EN Los citados Cuadernos y en sus números 2 y 5, LO SISTEMAS DE GOBIERNO LOCAL:EL PLAN A 4 AÑOS Y LA BASE PRESUPUESTARIA POR ACTIVIDADES, y los  PRESUPUESTOS Y PROGRAMAS ANUALES, se recoge una síntesis de las metodologías al respecto, incluida la modificación periódica reglada de los presupuestos y su programación.


------------------------------------

Estos temas se han tratado en los seminarios "PRACTICAS DE GOBERNANZA EFICAZ2, "ACTIVISMO/LIDERAZGO POLÍTICOS" Y "EL ÚLTIMO AÑO DE MANDATO. CLAVE PARA MEJORAR/NOEMPEORAR RESULTADOS EN 2.015"

Leer + en este mismo blog y en los libros de referencia

No hay comentarios:

Publicar un comentario